Cornejo se encuentra en la Merindad de Sotoscueva, en la parte más norte de las Merindades.

monumento natural de ojo Guareña
Ojo Guareña es el conjunto de cuevas más extenso de la Península, de gran interés espeleológico, con santuarios prehistóricos en el interior y190 taxaanimales ( 115 terrestres y 75 acuáticas) de ella hay 12 especies acuática y 4 terrestres que son nuevas para la ciencia. Sobre un paquete de calizas y dolomías coniacenses, que descansan sobre un impermeable sustrato de margas y calizas arcillosas, los ríos Guareña y Trema se han introducido en el interior de este macizo del cretácico originando el complejo kárstico.
Centro de interpretación del complejo kárstico en Quintanilla del Rebollar, a 6 km de la cueva. Este centro actúa como Casa del Parque, porque tanto la cueva como su sifón y su entorno es un Parque Natural declarado por la Junta de Castilla y León.
Casa del Parque y Centro de Interpretación de Ojo Guareña
Cornejo
Al pie de la Cordillera Cantábrica, la Merindad de Sotoscueva domina un paisaje donde densos bosques se alternan con pueblos y verdes pastizales ganaderos. Aquí, pequeñas poblaciones se reparten por los vallejos calizos del sur de la Merindad, donde los arroyos y ríos han originado abundantes grietas, simas, cañones, sumideros y cuevas. Algunas de estas cavidades, conectadas entre sí, forman el gran complejo kárstico de Ojo Guareña que, distribuido en seis niveles y con más 100 kms de desarrollo, es considerado como uno los más extensos del mundo.
El Monasterio de Santa María del Rioseco es uno de estos lugares mágicos que merece la pena visitar al menos una vez en la vida. Estamos ante las ruinas de un monasterio abandonado junto a un entorno natural exuberantes.
Un lugar que se ha hecho muy popular en los últimos años por méritos propios. Y, sobre todo, gracias al trabajo voluntario de cientos de personas que con sus manos han rescatado del abandono el impresionante claustro de los monjes, también el interior de la iglesia, la sala Capitular, el Claustro de la Hospedería y su entrada principal. ¡Impresionante!